Historia, gastronomía, cultura, senderismo, patrimonio,… Gracias al entorno montañoso en el que se encuentra el Pirineo, las actividades que se pueden realizar en él son muchas. Si llega el viernes y todavía no tienes plan, quédate con nosotros porque te contamos todo lo que puedes hacer si pasas un fin de semana en el Pirineo aragonés.
Hablar de Pirineo es hablar de montaña y de naturaleza, pero empecemos por el principio. Has decidido pasar un fin de semana en esta zona y llegas el viernes por la tarde. Si es tu caso, te recomendamos dar un paseo por Jaca antes de tomar unas tapas para conocer la gastronomía local. Pasear por la Ciudadela puede ser toda una yincana si pretendes encontrar a los ciervos que se encuentran en el foso de la fortificación. Recorrer todos sus ángulos para continuar el paseo adentrándote en la ciudad y conocer su Casco Antiguo y la Catedral son otras dos actividades obligatorias si visitas Jaca. Y cuando se acerque la noche no hay mejor forma de empezarla que degustando comida típica de la zona. En la capital jaquesa encontrarás multitud de tabernas que ofrecen gran variedad de tapas que te dejarán boquiabierto. Y que sepas que si quieres conocer la fiesta nocturna de la ciudad, hay que decir que Jaca cuenta con varios pubs en los que la marcha está garantizada.
El sábado por la mañana te recomendamos disfrutar de la naturaleza. Conocer alguno de los picos o de los ibones que rodean la zona es una apuesta segura. Si eres más de adrenalina puedes optar la Selva de Oza para disfrutar de las tirolinas o conocer el Pirineo desde el cielo con las avionetas del aeródromo de Santa Cilia o con las diferentes empresas de vuelo en parapente que encontrarás en las inmediaciones de Panticosa.
Para comer, te sugerimos que sigas apostando por la comida típica y no hay nada más tradicional que las migas y el ternasco. Son dos de los platos más conocidos de la zona y los encontrarás en casi todos los restaurantes.
Conocer pueblos pirenaicos es una alternativa perfecta para disfrutar de la tarde del sábado. Castiello de Jaca, Hecho, Sallent de Gállego o Biescas son algunos de los puntos de mayor interés turístico. Perderte por sus calles escuchando la naturaleza y fotografiando la arquitectura de piedra característica de la zona son algunas de las actividades obligadas. Y este rincón del Pirineo sigue dando para más. Visitar la Estación Internacional de Canfranc y conocer su historia es otra actividad muy frecuentada por los visitantes. Otra opción es visitar el Monasterio de San Juan de La Peña. En este punto podrás conocer dos monasterios, el viejo enclavado en una roca enorme, y el nuevo, en la parte alta situado al lado de la pradera.
El deporte en el Pirineo varía en función de la época del año en la que se visite la zona. En invierno, los deportes de nieve en las diferentes estaciones como Formigal, Candanchú, Astún o Panticosa son una alternativa perfecta para quienes quieran deslizarse por las cumbres. Pero no es el único, patinar en la pista de hielo de Jaca o disfrutar de un partido de hockey son dos alternativas aptas para todos los públicos y conocer uno de los deportes que ofrece la ciudad.
Una vez que comienza el deshielo, el senderismo es la actividad principal y hay muchos puntos de especial interés. Uno de ellos es el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, donde hay excursiones para todos los niveles. Descenso de btt y ciclismo son otros dos deportes muy practicados en la zona que cuentan con carreras y competiciones muy reconocidas.
Las actividades que te proponemos pueden variar dependiendo de la época del año en la que nos visites. En invierno te recomendamos que disfrutes de la nieve en una de las estaciones de esquí que hay en la zona.
Estamos seguros de que si vienes a conocer esta zona del Pirineo, volverás a tu rutina encantado, habiendo disfrutado de las espectaculares vistas que hay en esta tierra. Además, tendrás la excusa perfecta para volver a visitarnos ya que siempre quedan cosas por hacer. Y es que un fin de semana en el Pirineo aragonés sirve para coger energía y aire puro pero, gracias a su amplia extensión, es imposible verlo todo. Así que si vienes y repites, será buena señal. No te lo pienses más, el Pirineo conquista.
