La Jacetania es un territorio que cuenta con actividades diarias y semanales. Deporte, cultura, tradiciones y un territorio idílico ofrecen un sinfín de posibilidades para todos los gustos y edades. Marzo es un mes en el que los días ya son más largos por lo que los días se pueden aprovechar al máximo. Deporte, naturaleza, cultura, tradiciones, festejos, gastronomía y relax son las posibilidades que ofrece La Jacetania, Pirineo en estado puro.
Conocer la ciudad de Jaca es un imprescindible de aquellos que visitan la zona. Pasear por sus calles adoquinadas, visitar la Catedral de San Pedro o la Ciudadela son algunos de los atractivos de la localidad.
Si hablamos de deporte, Jaca es famosa por el hockey sobre hielo, considerado el deporte local por excelencia. Ver uno de los partidos del Club Hielo Jaca o disfrutar de las posibilidades deportivas que se pueden realizar en la pista de hielo son otras de las alternativas de la ciudad de Jaca. En marzo, también se pueden realizar otros deportes como son los de nieve. Deslizarse por las pistas de esquí alpino o de fondo son un chute de adrenalina para cualquier amante de la velocidad. El Pirineo ofrece también posibilidades a nivel de senderismo, running, ciclismo o btt, escalada, etc.
Conocer pueblos rurales encantadores como Aísa, Hecho, Ansó o Siresa son otras de las formas de conocer la Jacetania. La arquitectura tradicional de piedra que conservan estos pueblos suponen un atractivo que muestra los valores auténticos de la sociedad tras el paso de los años. Al hablar de cultura también hay que destacar el Monasterio de San Juan de la Peña, enclavado en una roca, que cuenta toda la historia del medievo en Aragón.
Para reponer fuerzas, la gastronomía es esencial para sumergirnos en la esencia de un territorio. Migas, carne a la brasa o ternasco asado son algunos de los platos típicos que se pueden degustar en el territorio pirenaico. Además, Jaca cuenta con un montón de bares y restaurantes en los que tomar unas tapas acompañadas de uno de vinos o cervezas locales.
Y para afrontar la vuelta a la rutina con tranquilidad, una jornada de relax en el Balneario de Panticosa será el mejor final. Aguas termales y tratamientos de spa para que la visita la Pirineo llene de energía y bienestar la salud de quienes lo visitan.